domingo, 12 de octubre de 2008

¿ Se puede ser adicto al sexo ?

Pues, la respuesta es que SÍ : L@s afectad@s sufren temblores, ansiedad y síndrome de abstinencia - Esta obsesión enfermiza les lleva a buscar sesiones de sexo para mitigar la angustia - El 15% son mujeres. No se trata de que éstas sean multiorgásmicas o pluriorgásmicas, es la " necesidad" de tener sexo la que hace que ser adicto al sexo es ser un adicto,como un yonqui, vamos.
Miedo, temblores, mono. Sesiones de horas de sexo que no producen placer y que sólo mitigan por unos instantes la angustia, la ansiedad. La adicción al sexo está en el centro del debate. Y no porque el actor David Duchovny - el de "Expediente X "- haya pasado por una clínica. Hoy por hoy, no está reconocida como tal en el Manual diagnóstico y estadístico de trastornos mentales (Disease Statistical Manual -DSM IV TR-), la biblia de los psiquiatras, el manual que permite efectuar un diagnóstico.
Es una patología de la libertad.Cuando hay adicción, la persona lo pasa mal, no encuentra satisfacción, es incapaz de frenar y su obsesión interfiere en su vida. Afecta a su trabajo, a su capacidad de concentración, a la relación con sus amistades y hasta puede buscar entre ellas el satisfacer su adicción.El que haya parejas que practican sexo dos o tres veces al día no significa que sean adictos, es simplemente la pasión de la relación.La persona que sufre adicción sólo obtiene placer en el momento y al final del clímax sexual ya se siente mal, vuelve la ansiedad, que va a más y que necesita volver a aplacar con más sexo".
Las mujeres que acuden a consultas de siquiatría indican que el marido/pareja no le da lo que ella quiere y que por eso lo busca fuera de casa, que no lo puede evitar. En definitiva si una mujer es infiel, no es que tenga una enfermedad, es que ha roto con sus valores. Por último : Las adictas al sexo dicen que siempre les faltó personalidad. Que no sabían decir que no. Que existía una enorme falta de autoestima y de confianza en sí mismas.


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